Me das la fuerza de enfrentar al mundo
sin caretas puestas a nadar profundo,
me das la certeza de que todo está bien
con tu pureza de Jardín de Edén.
Me das el coraje de no tener vergüenza
de tener el temple, que nada me venza
le das la dulzura a mi te vespertino
y quitas la amargura del café matutino.
Me das el escudo contra los cuchillos
y ya eres mi embudo siendo aun chiquillo,
impactas mi espacio dormido tranquilo
como quien se deja llevar por el Nilo.
Derrumbas los miedos y acabas pretextos
quizás lo comprendas algún día de estos,
que eres mi sombrilla contra el temporal
Que eres el agüita de mi manantial.
Que eres el nidito donde me refugio,
y ya esta paloma no teme al diluvio,
vuelo por los cielos, vuelo libremente
eres el desvelo que me hace valiente.
Exquisito!!
ReplyDeleteNingun hombre puede imaginar estos sentimientos, por más que trate.
Bendita seas madre... como siempre bendita.
Que bello Pi... creo que es uno de los mas lindos que has escrito que yo he leido me parece tan tierno, tan cierto...tan puro... me encanto! Kuky
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