13.5.12

De repente ya es de tarde,
un sol morado se esconde
como se esconde un cobarde,
temiendo a la oscuridad
y de prisa se recoje
enojese quien se enoje
el se va, quien sabe a donde.

En un dos por tres la luna
se asoma timida y fria
sola como ninguna
sin proposito ni ganas
a cubrir la densa noche